miércoles, 5 de agosto de 2009

La Niña de los Pies Descalzos (pa ti)


Casi no la recuerdo caminando con sus pies descalzos, con los dos, no como la niña del cuento que de niña tanto me gustó…
La niña de los pies descalzos era distinta, era feliz, vino al Sur a buscar nuestro sol.
Yo asomé mis ojillos desde mi cajita de zapatos al exterior y con los suyos fui a dar, no la quise mirar y sin darme cuenta seguí a sus pies descalzos con rumbo al más allá de mi caja.
Hacía tiempo alguien le echó la llave a mi caja de zapatos y las encontré en sus manitas. Quise robárselas (¿cómo las encontró?), no quería que nadie las tuviera, quería vivir sola en mi cajita. Y allí estaba ella, toda una revolución.
Seguí sus pasos, ella no miraba hacia atrás, sabía que la seguía, dónde me llevaría. A veces miré hacia atrás, me alejaba de mi cajita y el miedo aparecía, el sur era mi vida, pero el sur me entristecía, los recuerdos dolían.
Y ella de mí tiraba, sin decirme nada, a veces yo paraba y ella paraba, y si yo daba un paso ella retomaba y así caminábamos al mismo lado aún sin estarlo.
Porque ella no estaba, porque yo no estaba. Y el miedo de creer que me salvaría apareció. Era un mal sueño, acabaría huyendo y encerrándome de nuevo, fue bonito mientras duró, siempre ponía final a mis historias.
Di la vuelta y corrí lejos de ella, la perdí de vista, pensé que nunca más volvería a verla.
Y encerrada en mi cajita un día quise mirar hacia fuera y entonces allí la vi de nuevo (¿nunca se había ido?), en una mano mi llave, sus pies descalzos, en la otra el sol sureño…
La niña de los pies descalzos, la niña invisible que siempre está, despiértame y tira esas llaves. No cierres mi cajita, déjame compartir mis zapatos con tus pies descalzos.

La niña de los pies descalzos, Rocío Guzmán
(Cuentos de la Caja de Zapatos)

(No te preocupes que siempre tendrás mis zapatos para tus pies descalzos)

1 comentario:

Lorena Gonzalez dijo...

...gracias por tus zapatos...hoy tengo más ganas de seguir caminando...te kiero...